¿Cuáles son las secuelas a Largo Plazo de la COVID?

A dos años de la aparición de la pandemia por COVID-19, el mundo ha entrado en una nueva normalidad donde por necesidad, se han hecho rutinarios hábitos sanitarios como el lavado constante de manos, uso de cubrebocas y desinfección de espacios de trabajo, así como mantener distancia o espacio entre las personas para ayudar a prevenir la propagación de la enfermedad.

COVID-19 puede implicar persistencia, secuelas y otras complicaciones médicas que duran semanas o meses después de la recuperación inicial ⁽¹⁾.

Estudios han definido la COVID larga como de 14 a 110 días después de la infección viral. Se estimó que el 80% de los pacientes infectados con SARS-CoV-2 desarrollaron uno o más síntomas a largo plazo. Los cinco síntomas más comunes fueron fatiga (58%), dolor de cabeza (44%), trastorno de atención (27%), pérdida de cabello (25%) y disnea (24%) ⁽¹⁾. 

Otros síntomas se relacionaron con enfermedad pulmonar (tos, molestias torácicas, reducción de la capacidad de difusión pulmonar, apnea del sueño y fibrosis pulmonar), cardiovascular (arritmias, miocarditis), neurológica (demencia, depresión, ansiedad, trastorno de atención, trastornos obsesivo-compulsivos), y otros fueron inespecíficos como pérdida de cabello, tinnitus y sudor nocturno ⁽¹⁾.

La razón por la que algunos pacientes experimentan síntomas a largo plazo después de COVID-19 es incierta. Esto podría explicarse parcialmente por factores controlados por el huésped que influyen en el resultado de la infección viral, incluida la susceptibilidad genética, la edad del huésped cuando se infecta, la dosis y la ruta de infección, la inducción de células y proteínas antiinflamatorias, la presencia de infecciones concurrentes, la exposición pasada a agentes reactivos cruzados, etc. ⁽¹⁾

Los equipos multidisciplinarios son cruciales para desarrollar medidas preventivas, técnicas de rehabilitación y estrategias de manejo clínico con perspectivas integrales del paciente diseñadas para abordar la atención prolongada de COVID-19 ⁽¹⁾.

Papel del sistema inmune en la infección por el SARS-CoV-2

El papel del sistema inmune en la infección por el SARS-COV-2

El sistema inmune es capaz de controlar adecuadamente la infección por el SARS-CoV-2 en un 81% de los pacientes, cursando de una forma asintomática o con sintomatología moderada; sin embargo, un 19% de los pacientes infectados sufren una enfermedad grave, que llega a convertirse en crítica y mortal. El virus SARS-CoV-2 es capaz de alterar profundamente el comportamiento de los componentes moleculares y celulares del sistema inmune. Las decisiones iniciales del sistema inmune innato son responsables de una correcta o inadecuada respuesta del sistema inmune adaptativo y, junto con las comorbilidades, están directamente asociadas a la progresión de la patología ⁽²⁾.

Como fortalecer el sistema inmune

Mantener un sistema inmune fuerte ayuda a defender el cuerpo de la llegada de enfermedades graves. Mantener una adecuada alimentación, realizar actividad física y descansar adecuadamente ayudan a fortalecer el sistema inmune. La alimentación ocupa un puesto especial dentro del fortalecimiento de las defensas del sistema inmune. Mantener una alimentación saludable ayuda también a que la microbiota intestinal se encuentre en estado óptimo, lo que ayuda a regular y educar al sistema inmunológico.

Una dieta sana y equilibrada nos proporcionará los elementos necesarios para mantener nuestras condicionas de salud en óptimas condiciones. Principalmente una dieta balanceada rica en vitaminas y minerales.

FITOFÁRMACOS

Actualmente la Medicina Alternativa y Complementaria (MAC) cobra más terreno y existe un renovado interés por los medicamentos naturales de origen vegetal, tanto por parte de los médicos como de los pacientes ⁽³⁾.

Los fitofármacos son medicamentos cuyos ingredientes activos se producen exclusivamente a partir de plantas, o de partes de plantas. Se caracterizan por ser terapéuticamente eficaces, su uso debe ser inocuo y tolerarse bien.

Una publicación realizada por Minsu J. (2021) describe: “Finalmente, encontramos que el tratamiento con EGCG disminuyó los niveles de ARN y proteína del coronavirus en los medios celulares infectados” ⁽⁴⁾, reconociendo así la actividad inhibitoria de la replicación del coronavirus por EGCG extracto polifenólico del té verde..

“En virtud de su capacidad para modular la activación y agregación plaquetaria, así como de los factores implicados en la cascada de coagulación, el Resveratrol parece ser un agente farmacoterapéutico atractivo en la lucha contra la COVID-19” menciona el artículo publicado por Giordo, et al. (2021) ⁽⁵⁾.

La curcumina inhibe la principal proteasa de COVID-19, tiene actividad antiviral directa contra varios virus, incluido el SARS-COV. Otros efectos beneficiosos que sugieren que la curcumina puede ser apropiada en el tratamiento de COVID-19 incluyen alivio de la exudación y edema, atenuación de lesiones pulmonares, reducción de la inflamación de las vías respiratorias, inhibición de la proliferación de células epiteliales bronquiales, mejora de la neumonía, alivio de la fibrosis y mejora del índice pulmonar ⁽⁶⁾.

EGCG Inmuno Complex es una fórmula rica en polifenoles altamente antioxidante, fitofármacos con altos grados de pureza y calidad. Sus ingredientes principales (EGCG, Curcuminoides, Resveratrol y OPC) están científicamente comprobados por sus propiedades inmunomoduladoras, antioxidantes, antiinflamatorias y antivirales entre otras. EGCG Inmuno Complex es un excelente aliado para proteger y favorecer la respuesta del sistema inmune.

LACTO Inmuno es una fórmula simbiótica de probiótico, prebióticos, vitaminas y antioxidantes, cuya acción sinérgica proveen al organismo el equilibrio de la microbiota intestinal, ejerciendo beneficios ante las alteraciones del sistema gastrointestinal, así como favorecer e incrementar la adecuada repuesta del Sistema Inmune.

“Mejora tu estilo de vida y Fortalece tu Sistema Inmunológico”

REFERENCIAS

1. Lopez-Leon, S., Wegman-Ostrosky, T., Perelman, C. et al. Más de 50 efectos a largo plazo de COVID-19: una revisión sistemática y un metanálisis. Sci Rep 11, 16144 (2021). https://doi.org/10.1038/s41598-021-95565-8
2. J. Monserrat Sanz, A.M. Gómez Lahoz, R. Oliva Martín. Papel del sistema inmune en la infección por el SARS-CoV-2: inmunopatología de la COVID-19. Medicine – Programa de Formación Médica Continuada Acreditado. Volume 13, Issue 33. 2021. Pages 1917-1931. https://doi.org/10.1016/j.med.2021.05.005
3. Liang T. Complementary and alternative medicine: the roots of healthing. Gastroenterology 1999;117:1041 https://doi.org/10.1016/S0016-5085(99)70385-9
4. Minsu Jang, Rackhyun Park, Yea-In Park, Yeo-Eun Cha, Ayane Yamamoto, Jin I. Lee, Junsoo Park. EGCG, a green tea polyphenol, inhibits human coronavirus replication in vitro. Biochemical and Biophysical Research Communications. Volume 547. 2021. Pages 23-28. https://doi.org/10.1016/j.bbrc.2021.02.016
5. Giordo R, Zinellu A, Eid AH, Pintus G. Potencial terapéutico del resveratrol en trastornos hemostáticos asociados a COVID-19. Moléculas. 2021; 26(4):856. https://doi.org/10.3390/molecules26040856
6. Mercola (2020). A curcumina inibe a enxurrada de citocinas induzida por virus. A curcumina inibe a enxurrada de citocinas induzida por vírus (mercola.com)