Un niño bien nutrido es un niño más saludable y resistente a las enfermedades. Una adecuada nutrición durante los primeros años de vida es un asunto de vital importancia. Una alimentación balanceada durante la niñez, junto con la actividad física y además una adecuada suplementación de antioxidantes y nutrientes, te ayudarán a lograr que el potencial de desarrollo de tus pequeños sea el óptimo, tengan una vida sana y reduzcan el riesgo de sufrir enfermedades.